Ecos en el polvo [LIBRE]

por **Alexia Sloane** Sáb 12 Oct 2024, 14:15

Recuerdo del primer mensaje :

Uno de junio de 2016.
Antiguos laboratorios de Pandemonium,
LOS ANGELES.

Alexia ajusta las correas de su mochila mientras observa el paisaje desolado frente a ella. El viento levanta polvo y escombros, y el silencio es casi tan inquietante como el hecho de estar fuera de la seguridad de Pandemonium. Nunca había sido su intención salir de la base, pero hoy las circunstancias la han llevado a estar allí. Uno de los proyectos en los que estaba trabajando necesitaba urgentemente materiales específicos que no se encontraban dentro de las instalaciones. Habían localizado un antiguo laboratorio cercano y, según informes, aún podría haber suministros útiles. Era una oportunidad, aunque arriesgada.

A su lado, el soldado Mason, un hombre robusto con mirada severa, permanece atento, escaneando el horizonte con su arma lista. A diferencia de Alexia, él no parece en absoluto perturbado por el entorno.

—No deberíamos estar mucho tiempo aquí —dice Mason, sus ojos recorriendo cada rincón. La tensión en su voz es palpable.

—Solo lo necesario —responde Alexia, ajustándose los guantes. Sabía que esto era una mala idea, pero la ciencia a veces requería riesgos.

Avanzan hacia las puertas del laboratorio, o lo que queda de ellas. Un sonido repentino corta el silencio. Ambos se detienen, tensos. Alexia siente cómo se acelera su corazón, pero antes de poder reaccionar, el suelo bajo sus pies cede. El viejo pavimento se derrumba y, en cuestión de segundos, se encuentra cayendo.

Al impactar, el aire se le escapa de los pulmones. Al abrir los ojos, se encuentra sola en un pasillo subterráneo. Los escombros y el polvo la rodean. Mason no está.

—¡Mason! —grita, pero solo le responde el eco de su voz. El silencio pesa más de lo que le gustaría admitir.

Traga saliva, sintiendo el pánico asomar en el borde de su mente. Mira a su alrededor. La única salida parece ser un pasillo oscuro que se extiende hacia lo desconocido. El dilema es claro: ir en busca de Mason o regresar sola a Pandemonium, sabiendo los peligros que acechan afuera.

—Esto no estaba en los planes... —murmura mientras enciende la pequeña linterna de su mochila. Sin otra opción clara, empieza a avanzar por el pasillo, su mente ya calculando las probabilidades. En un lugar como este, todo puede suceder.

No tarda ni un momento en recuperarse para volver a sujetar la escopeta con ambas manos y disparar apuntándole a la última cabeza a la criatura, esta vez tratando de asegurarse de que acabará con ella para seguir moviéndose.
La criatura se adelanta a Adam y detiene la escopeta con las garras tratando de apartar el arma de la trayectoria, lo cual consigue y el atronador disparo se pierde tras la criatura, la cual chilla preparando un escupitajo de ácido, decidida a terminar con la vida del mercenario y convertirlo en su cena.

-Y que tal esto!?-A lo que Adam salta por encima de esta, quien mantiene el agarre en el arma y el mercenario aprovecha por la fuerza de la gravedad para recargar con el peso de su cuerpo la corredera baja. Cuando sus pies tocan el suelo sujeta la escopeta poniendo la mano libre sobre la parte posterior de las garras de la criatura y da un paso atrás para terminar de meter el siguiente cartucho en la recámara y disparar.

Soundtrack

-A tomar por culo...-Mustia entre dientes cuando explota la segunda cabeza del enemigo y el cuerpo de este cae al suelo inerte liberando el arma de BalioN, entre gorgojeos y supuración el cadáver de esa maldita cosa deja de retorcerse en el suelo. Él avanza unos pasos y recoge una de las luces químicas y la engancha en el chaleco. Camina con calma hacia el frente mientras mete dos nuevos cartuchos en el arma para tenerla completamente cargada.

Se pone un cigarro entre los labios pero no se lo enciende, parece más una costumbre para su concentración que la necesidad de fumar como tal. A cada paso se pone más recto, hasta que llega hasta la luz química que lanzó más adelante y la recoge levantando la mano izquierda sobre su cabeza para alumbrarse, no tiene ningún miedo, para él solo son moscas muy grandes, nada más, otra piedra en el camino que no será más que eso al final del día, al salir del pasillo en el que estaba llega hasta lo que parece la entrada a un almacén, la puerta está rota y arrancada de un lateral así que entra con cuidado y echa un vistazo a la sala para ver si puede encontrar algo de valor.

"Vamos Lexi, tu puedes, aguanta..."Su cabeza se llena de dudas cuando sigue escuchando disparos, pero eso no lo va a detener al contrario, saber que está luchando le hace tener más claro el objetivo de volver a reunirse con ella.