En alguna ocasión... ~ A. J.

Ashley B. Jones

Abrió los ojos con un largo suspiro, como si llevase años sin tomar aire... lo cual era ridículo. Ashley se irguió sobresaltada, aterrada... su corazón latía a mil por hora y sentía que la cabeza le daba vueltas. El olor a pólvora y fuego inundaba sus fosas nasales. Anochecía y con el aturdimiento solo logró a distinguir algunas hogueras en la lejanía y par de figuras tambalearse de un lado a otro torpemente.

— ¿Izzy, Matt...? — sollozó mientras hacía un gran esfuerzo por ponerse en pie. Se llevó una mano a su cabeza y entonces vio la sangre en sus dedos. Se había dado un buen golpe, pero aquello no era lo más alarmante. Ashley empujó las telas de la tienda de campaña rota que habían caído sobre ella y se fue poniendo en pie. La destrucción del campamento era evidente. Pero lo peor fue que conocía a la figura de en frente.

— ¿Dante? — se le hizo un nudo en el estómago y corrió hacia él. El hombre yacía muerto en el suelo con varios disparos en el pecho. Estaba muerto. — Oh Dios mío, Dante... — sentía que le faltaba el aire. Alzó la mirada rápida, los zombies que avanzaban en el campamento no se veían muy demacrados y entonces comprendió que muchos de ellos los conocía, que eran gentes del campamento. Entró en pánico y antes de que la vieran se agachó y avanzó tras alguna de las tiendas que aún se mantenían en pie.

Stefan estaba muerto frente a ella, se dio cuenta cuando pegó su espalda contra la tienda y miró al frente. El ex soldado estaba sentado a los pies de un árbol, el estómago era una maraña de sangre y vísceras... seguramente provocado por una escopeta. Las lágrimas caían en silencio cubriendo sus mejillas. ¿Dónde estarían Matt, Izzy... Alec o Jenna? Cerró los ojos con fuerza y tapó su boca con ambas manos, tratando de hacer el menor ruido posible.