{#} Tallahassee IV - Abril de 2015

Abril de 2015

— Aquí Tallahassee desde Tallahassee's en... ¡Tallahassee, Florida! — Saludo al micrófono o a quien diablos me esté escuchando. — ¿Cómo estáis mis pequeñines zombie killers favoritos? — Pregunto al micrófono con un susurro divertido. — Las cosas por aquí muy tranquilas y aburridas, ¿eh?, os pido siempre que si alguien me escucha que me hable, ya sabéis cabroncetes, no os guardéis datos de interés para vosotros solos, nos interesa el clima, la situación de algunos Estados... Como siga esto así de tranquilo me jubilo, me voy a la costa a tomar el sol y beber cerveza... Que es básicamente lo que hago aquí pero sin playa — Sonrío con cierto tono de diversión.  — Veamos... Hoy ni os pongo música, estoy en huelga, ¿queréis algo?, pues me lo pedís... — Doy varios golpecitos con mis dedos en el borde de la vieja mesa de madera mientras que miro de reojo como casi siempre por la ventana, la carretera, la desolada nada... Ni un alma se ve por ahí, ni uno de esos seres, en definitiva, nada. — Las cosas están siendo bastante tranquilas por aquí, por eso no me he molestado en hablar antes, ¿me dabais por muerta?, lo siento, me queda mucho por joder... — Sonrío con cierta diversión, sé que nadie me escucha, pero esto sirve de auto-ayuda más que de otra cosa. Puede que tenga la esperanza de que alguien conteste, ya lo han hecho alguna vez, pero últimamente es tan solo la soledad la que contesta, con esa estúpida estática que es lo único que me acompaña ahora, ese sonido que rompe el silencio uno y otra vez.

— Tengo buenas y malas noticias, ¿por dónde empiezo? — Me rasco la sien al dejar esa pregunta al aire y continúo. — Las malas, se ha acabado el vodka caramelo... — Le doy el último trago al vaso y suelto un eructo para mis queridos oyentes. — Las buenas... Aún queda ron miel — Termino por sentenciar la frase mientras me río algo, tal vez locura o efecto del alcohol.

— Por aquí empieza a hacer bastante calor, ¿cómo vais por el resto del país majos? — Me rasco el esmalte de uñas de una mano, quitando la pintura, últimamente ando tan aburrida que es uno de los lujos que me puedo dar, pintarme las uñas. — ¿Hace tanto calor por Atlanta cómo es de costumbre por estas fechas? — Pregunto a la nada, la estática vuelve a responder y con un suspiro me echo en el respaldo de mi silla hacia atrás, mirando a las musarañas, hoy esperaré, siento el cansancio de hablar para un mundo que deja de existir poco a poco. Así que con la radio encendida me levanto y camino por el bar, el sonido que produce mis botas al pisar los viejos y desgastados tablones de madera es lo único que se escucha mientras me apoyo en la barra y abro la siguiente botella de mi larga lista de victimas en el bar. La chapa de la cerveza se resiste, pero finalmente cede y yo le doy un trago al par que observo la radio y luego miro fuera a través de la ventana, nada en especial.

Abril de 2015

— ¿Alguna vez has sentido esa desagradable sensación de que alguien estaba justo detrás de ti...? — Mi voz suena en un susurro, tratandod de meter en situación a quien diablos esté escuchando. — ¡Buuuh! — Grito al micrófono. — Aquí Tallahassee desde Tallahassee's en... ¡Tallahassee, Florida! — Repito mi más típica frase de presentación. — Lo sé, no soy una chica con una amplia imaginación... — Hablo mientras que con una botella de cerveza en mi izquierda y con el abridor en la derecha hago caer la chapa que la cierra.

— Por vuestra culpa me estoy volviendo toda una alcoholica, esta va a vuestra salud — Aunque nadie me ve alzo el botellín de cerveza hacia el micrófono y seguidamente le doy un largo trago, cuando acbo eructo al micrófono sin importarme lo más mínimo. — Está buena — Comento con ironía. — ¿Y qué tal están mis pequeños oyentes, eh? — Pregunto mientras que registro entre mis cosas hasta dar con una hoja de papel en la que voy anotando los días, es cuando me doy cuenta de la fecha excata.

— ¡Chicos, hoy acaba aabril y le damos la bienvenida a mayo!, ¿tenéis muchos planes para este mes? — Vuelvo a darle un nuevo trago a la cerveza. — Ahora las temperaturas comienzan a subir, adiós a las lluvias, esa odiosa humedad que tanto bufaba mi precioso pelo... — Sonrío. — Tal vez vaya a la playa en cuanto haga algo más de calor, ¿y vosotros, estáis muy ocupados con los mordedores? — Registro entre las cosas de mi desordenada mesa hasta que doy un pintauñas de color negro, sin más comienzo a pintar las uñas de mis manos mientras que hablosin prestar atención a nada más.

— ¿Cómo están las cosas por el resto del país?, digo yo que empezareis a notar el calor, ¿lo notarán también los zombies? Por Florida se está genial, para que os voy a engañar, pero seguro que hay otros sitios igual de buenos, como California, que es tal vez uno de mis lugares favoritos, igual que Las Vegas, pero eso era solo por el juego... allí una no se aburría. ¿Qué decís?, ¿habrán muchos zombies vestidos de Elvis por las fabulosas calles de Las Vegas? Sería todo un espectáculo digno de ver, huir de un Elvis zombie... — Hago una pausa mientras que termino de perfeccionar una de mis uñas.

— Y ahora los deportes... ¿Cómo va el juego del tiro al zombie? — Sigo pintando mis uñas, que la verdad no están quedando nada mal. — ¡Ah! Antes de que lo olvide, por Kansas las cosas no es que estén siendo lo mejor, el otro día contacté con un tal Harold de Kansas, la zona norte del estado está sufriendo tal vez la peor temporada de lluvias y además me comentó que hay cierto centro comercial plagadito de unas extrañas arañas gigantes... se merendaron a un amigo suyo de solo un bocado y al otro le cayó una especie de veneno que acabó con él en unas horas. El centro comercial se llama Carter's, así que ya sabéis queridos míos, si me escucháis no os hagáis los valientes y si sí... Puede que el negocio de la sede esté en auge esta primavera... — Sonrío. — Y lo sentimos mucho por los amigos de Harold, gracias por el aviso y sin más rodeos... Os dejo hasta otro día mis pequeños zombiekillers, eso sí, me despido con este temazo — Y sin más dejo de hablar, corto la señal del micrófono y pongo a sonar uno de los viejos dicscos del bar. Las primeras notas de Slow Ride de Foghat (clic) comienzan a sonar. Me levanto tarareando la canción y me marcho a hacer mis cosas.